Gonzalo Argote de Molina (Sevilla, 1.548 – Las Palmas de Gran Canaria, 1.596), militar, escritor, editor literario, anticuario, historiador, genealogista y Caballero Veinticuatro de Sevilla.
De familia noble y adinerada, desde temprana edad estuvo al servicio de las armas, pues en el año 1.564, con tan solo 15 años, intervino en la conquista del Peñón de Vélez de la Gomera (Marruecos) y en 1.568, ya con la graduación de alférez provincial de la Santa Hermandad de Andalucía, combatió contra los moriscos durante la rebelión de estos en las Alpujarras de Granada y después militó en las galeras de España que estaban al mando de don Juan de Austria.
En 1.578 fue nombrado Juez Ejecutor de la Santa Hermandad de Sevilla, sucediendo a Diego Fernández de Andrada, aunque tuvo que esperar dos años de litigios hasta tomar posesión del cargo.
Argote de Molina alcanzó también la dignidad de Caballero Veinticuatro de Sevilla y los títulos de señor de la Torre de Gil de Olid y de la Torre de Don Jofre.
Marchó a las Islas Canarias en 1,586 para casarse con doña Constanza, hija del primer marqués de Lanzarote, don Agustín de Herrera y Rojas. Durante su estancia en la isla de Lanzarote mandó construir en 1.588 el convento franciscano de Teguise, del que tan solo queda en la actualidad la iglesia, un templo que fue dedicado a Nuestra Señora de Miraflores.
Defendió Lanzarote del ataque argelino de Morato Arráez en 1.586, quien capturó a su esposa y suegro, que tuvieron que ser rescatados por Argote de Molina pagando una importante cantidad de dinero.
También participó en la defensa de la isla de Gran Canaria del ataque por parte del corsario inglés Francis Drake en 1.595.
Después de dejar el ejercicio de las armas, se dedicó al estudio de las letras y a la creación de una gran colección de antigüedades: retratos, armas, monedas, animales disecados, libros antiguos, plantas y piedras, convirtiendo su hermosa casa de la calle Francos de Sevilla en un famoso museo. Llegó a adquirir tanta celebridad este museo que se afirma que Felipe II lo visitó de incógnito durante su estancia en la Ciudad en el año 1.570.
En su valiosa biblioteca había algunos códices medievales de los que tan solo se conservan las noticias que Argote de Molina nos dejó, entre ellos un manuscrito del “Libro del Buen Amor”, obra de Juan Ruiz, Arcipreste de Hita.
Fue autor de varias composiciones poéticas y de los seis libros del repertorio nobiliario “Nobleza de Andalucía” (1.588), que contiene diversas informaciones históricas y literarias. También publicó otros libros de gran interés en su época, como su “Discurso sobre la poesía castellana” (1.575), que constituye uno de los primeros intentos en clave humanística de analizar el panorama histórico castellano.
Durante su vida trató a grandes figuras del humanismo como Juan del Mal Lara, y a poeta y a poetas, como Fernando de Herrera, Gutierre de Cetina y Juan de la Cueva entre otros.